¿Me molestan estas escenas? Pues la del tiro en la cabeza, sí. Con los años, he desarrollado una sensibilidad exacerbada a las escenas de violencia, sobre todo a las gratuitas, y cuanto más crueles, peor. Así que, esta noche, seguramente tendré alguna pesadilla (metafóricamente hablando: es decir, ahora mismo siento una corriente de empatía con respecto a la víctima nada agradable. Alguna neura que se escapa de mi control). La de las tetas no me molestó en absoluto, aclaro 🙂
Sin embargo, ¿no había un horario de protección de la audiencia infantil o similar?
Esta entrada tiene tres objetivos:
1. Romper con el bloqueo de unas cuantas semanas sin escribir por aquí. El bloqueo: muchos proyectos (mucho mirar al futuro) y bajo rendimiento (no centrarme en el aquí y ahora: una de las cosas de la filosofía zen que debería estar aplicando a rajatabla);
2. Demostrar la incongruencia y la hipocresía de los políticos y los directivos (que son los que pagan, y ordenan, me temo, a los programadores de las parrillas), que demuestran que la educación infantil les importa tanto como un mojón en el camino;
3. Que con una programación tan aburrida, tan orientada al cotilleo, la casquería, la bazofia y el fútbol, pues oye, que ya me estoy descargando el S03E03 de Dexter (sí, dije que me molestaba la violencia gratuita: si la obra es buena y el guion lo pide, puedo -con reparos- soportarlo; si la peli es mala, entonces ya me dan arcadas) para vencer el tedio y el sopor de las ondas de televisión españolas.
Feliz domingo.